las grandes pelis choteadas

Hay películas hollywodenses que casi todos hemos visto: cintas palomeras, relajadas y sin mayor gracia que estar muy entretenidas. ¿A poco no? Son pelis de esas que programan a cada rato en la tele... sueles estar ahí, haciendo zapping un sábado en la tarde y zas te encuentras una de éstas. Y pues ya mejor le dejas vaya en el punto que vaya y la miras una vez más. ¿O ustedes no hacen eso?

Hoy es vienes, he tenido una semana ajetreada y lo único que quiero es salir de la oficina, irme a casa y cuajarme mientras veo una película no elegida por mi sino por el programador del canal cualquiera de tele abierta. Y se me ocurren ejemplos.

Marti no sabe destapar una pepsicola de botella y todos bromean acerca de su chaleco "salvavidas", usa su walkman (aka ipod retro) como arma y viaja en el tiempo en un auto que abre las puertas hacia arriba uuuuuhhh. La segunda parte es una mugre y la tercera recupera la gracia. Me encanta el chiste aquel de "te vas a llamar Clint Eastwood" (o algo así).

A mi no me gusta ninguna película de Indiana, excepto ésta. No sé si es por Sean Connery o a que se deba, pero La Última Cruzada es una cinta que me hace reir mucho. Por otro lado, la verdad es que nunca recuerdo bien a bien la historia...

Bueno. Una grande entre las grandes. La segunda incluso mejor que la primera. Y ahí debieron haberse quedado porque a ver, qué necesidad tenían de arruinar una historia tan buena. Era muy joven cuando la vi la primera vez y el ahora gobernator me daba miedo. Hum. Me sigue dando miedo, pero actualmente por distintas razones... ¿saben?

De ésta hicieron una versión femenina muchos años después... o másmenos, porque al final eso viene siendo Si yo tuviera 30 (13 going on 30) con Jennifer Garner ¿no? La de Tom Hanks no me pega tanto, aunque igual es porque ya hace rato que la vi por última vez. En el caso de la de Jennifer, pues ¿cómo les explico?... Es que ya tengo 30.

Cha-chán! Uuuhhhh. Otra de esas. Ésta la vi en el cine, con mis hermanos. Por entonces mi hermanito menor era un niño y estaba obsesionado con los dinosaurios. Ahora ya es grande, estudia biología y está obsesionado con los reptiles. Igual las cosas no cambian tanto.

He olvidado por completo de que se tratan la segunda, la tercera y la cuarta. Pero de la primera hubo un momento en el que me sabía los diálogos y andaba por la sala haciendo la patada de la grulla con la gracia de un hipopótamo. Hace unos años la programaban muchísimo en el canal 5 y era inevitable: topaba con ella y fijo que la veía. ¿Ya se murió el sr. Miyagi, no?

Y para cerrar el post, La Historia sin Fin. ¿Alguien se acuerda como se llama el dragón volador? Qué bonito que era ¿no? Cuando era niña esta película solía dejarme una sensación de desasosiego. La nada... ¿qué era la nada? ¿cómo es que no haya nada? Años después mi papá me lo explicó así teóricamente y todo y quedé peor. No sé cuantas veces he visto esta película, el libro lo he leído un par de veces. Es uno de esos casos donde aunque el libro es mucho mejor que la película (como prácticamente siempre) pues uno no se pone a comparar demasiado porque el resultado cinematográfico es bueno.

Así pues, al rato que llegue a casa me voy a poner retro, me meteré en mi pijama y veré alguna película como estas. Ya chocheo.