una extraña entrada como de blog personal

Lunes... es el dia que cambio de modo freelance a modo oficinista. Ventajas y desventajas de la combinación: una de las desventajas es que estoy haciendo mi post del lunes a las dos de la mañana y que mañana debo despertar-ducharme-correr al trabajo-forzar el encendido a punta de cafeseses. Así que ustedes disculparán.

Voy llegando del Vive Latino y no, no les hice un reporte. Llevé la cámara y todo, pero las mejores horas para streetstyle parecen ser las de la mañana y yo llegué muy tarde. Ni alcancé a ver a Pustulio para que me diera una calcomanía de Buentono23. Y no quise hacer el numerito grupie en la carpa vip. Y llovía y en el escenario me sentí muy boba y nota mental: a menos que vaya en muy pero muy buenas condiciones de trabajo, prefiero ir de público.

Este fin de semana apenas me bajé de mis zancos y me di cuenta de dos cosas: una, es que ya me preocupa cuando un niño o su papá me reconocen en un lugar y me dicen "ah, tu eres la misma del año pasado". La otra es que la paso mal cuando hago conciencia de que el vestuario con el que voy a ganar dinero aunque sea de payaso se compone de herencias y compras hechas al pasar. Así que ya estuvo. Aunque sea zanquera de ocasión, necesito al menos una peluca decente. Y aquí es donde clavo la foto de Lily Allen

Me gusta muchísimo su peluca, su maquillaje, su guante-homenaje y en general casi todo. No me gusta su trajecito ni su escote ni su barriguita.

Repito pues, necesito una peluca como esa, pero tengo indecisiones varias (así o un poco más corta, morada o rosa o roja o blanca o azul rey).

Aunque por el momento lo único-único que de verdad se me antoja es ponerme una playera blanca e irme a la cama.

Y eso es justo lo que voy a hacer. Hasta mañana.