hace cuatro o cinco noches
que te espero
seis o siete dias que te lloro
se me jodió el verano
sin oirte/ sin verte
sin embargo esperarte
(como si pudieras volver sonriendo
-esta vez- más cansado que nunca
pero mucho más sabio)
acaso vuelves
más cansado que nunca
nunca mucho más sabio
te sé / te conozco
o quizá es tu presencia
hecha de doce ausencias
de quince desventuras
no estás
y las luces iluminan distinto las cosas
cuando no llegas
me he soñado de ti
ausente de ti
en las piedras existe una tristeza de siglos
que no es la mia
se ilumina también una felicidad ajena
algo brilla, húmedo
me hipnotiza de ti
me enajena
hace como mil años estábamos aquí
en el mismo lugar
hace cuarenta noches que te espero
noventa dias que te lloro
setecientos veranos de no oirte no verte
y sin embargo esperarte
como si supiera que acaso
volverás, y sonriendo
más cansado que nunca
pero mucho más sabio
descansa
tiéndete en la hierba
me volveré la tierra que te dará acogida
te sé/ te conozco
aunque me han dicho que no es posible
(conocerte)
saber de nadie
eres un niño serio que sonríe con los ojos
que se rie con el mar
y vuelves
más cansado que nunca
nunca mucho más sabio
o quizá sólo presiento tu presencia
hecha de mil ausencias
de quince desventuras
vuelve
o, en fin, no vuelvas
pero si estás aqui por favor
no te vayas
siempre te necesito