Lunas, marfiles, instrumentos, rosas, lámparas y la línea de Durero, las nueve cifras y el cambiante cero, debo fingir que existen esas cosas. Debo fingir que en el pasado fueron Persépolis y Roma y que una arena sutil midió la suerte de la almena que los siglos de hierro deshicieron. Debo fingir las armas y la pira de la epopeya y los pesados mares que roen de la tierra los pilares. Debo fingir que hay otros. Es mentira. Sólo tú eres. Tú, mi desventura y mi ventura, inagotable y pura.
Jorge Luis Borges
Bonita estrofa!!!
ResponderEliminarAyyy el amor... besos!!!
ResponderEliminarAAhhhh que bonito es el amor.
ResponderEliminarJamas se puede fingir un sentimiento tan hermoso y grande como es el amor.
<3
Saluditos
que lindo botica!!!
ResponderEliminarme encanta cuando subes este eipo de cosas tan lindas!
Ese Borges pocas veces se ponía meloso, ¡pero cuando lo hacía!... Sublime.
ResponderEliminarUna pregunta: ¿por qué no lo pusiste en versos? (no es reclamo disfrazado de pregunta, de verdad tengo curiosidad).
Saludos.
Hola otra vez, je.
ResponderEliminarPues curiosamente es un soneto perfectamente rimado (de hecho casi podríamos decir que al final está sobrerimado, pero está tan bien hecho que no se torna molesto. El feliz accidente de escribirlo así como está aquí lo demuestra).
Está acá como soneto.
Gracias por tu invitación, que tomaré gustoso.
Hasta pronto.