Saks Fifth Avenue, el de verdad.

El Saks Fith Avenue de Plaza Carso debe ser la departamental más triste del mundo. La primera vez que fui a un Saks fue a ese e iba acompañada por @Guapologa y @Janibga y fue un deleite mirar de cerca prendas que sólo había visto en una pantalla.

Las siguientes veces ya no fueron tan lindas. Descubrir que tienen prendas de tres temporadas atrás y etiquetadas full price no es bonito. En un arranque de locura eufórica quise comprarme un modelo específico de zapatos Yves Saint Laurent y nunca hubo mi número -además de que sólo ofrecen 2 o 3 colores-. Lo último fue cuando busqué un vestido blanco que pudiera usar en mi boda. Nada, el desierto. 


El mismo @Janibga me "regañó" diciendo que no venden vestidos de novia. No buscaba un vestido de novia, buscaba un vestido de diseñador que fuera blanco y que funcionara para mi boda, porque no me parece atractivo gastar 60 mil pesos en un merengue de organzas y tules cuando podría gastarlos en un Lanvin blanco. No sé si me explico.

Con todos esos antecedentes, le dije a Héctor que una parada obligatoria en Nueva York tenía que ser Saks. Me acordé de la historia del vestido de novia porqué allá encontré (y sin buscar, más bien choqué con ellos) como ocho posibles candidatos. Uno, de Alexander McQueen. 


(Ya le pregunté a Héctor si se quiere casar conmigo, otra vez).

Total, que paseamos por Saks como los turistas que somos y yo le explicaba gritaba a Héctor "¡Mira! Proenza Schouler" y luego le echaba un rollo acerca de lo interesantes que me parecen las propuestas Jack McCollough y Lázaro Hernández y luego Héctor con su mirada diseñística me decía que si y porqué a él le parecían emocionantes los vestidos de Proenza Schouler. 

El paseíto por Saks me recordó porqué la moda me parece interesante. Mientras la voy conociendo le voy descubriendo más y más facetas y la faceta relacionada con el diseño me parece fascinante. Es una obviedad que de tan obvia a veces se me olvida: no basta con ver las prendas en una pantalla. Si no hay de otra, sirve, pero hay tantos aspectos que se pierden...

Y la otra gran obviedad es que un vestido es un vestido. ¿Qué tanto puede suceder con un vestido? Necesita una abertura para meter la cabeza y otras dos para los brazos. ¡Y sin embargo puede suceder tanto con un vestido! El McQueen de la foto, por ejemplo, es una poesía. ¿Porqué alguien querría ponerle escarolas y lentejuelas y pedrerías y hombreras y asimetrías a ver si con eso gana un concurso de diseño de modas? A veces lo más sencillo es lo más hermoso -y no forzosamente lo más fácil-.

Ya sé que me fui por las ramas pero quería contarles un poco de todas las emociones que sentí, si caray, paseando por una departamental. También quería enseñarles las fotos de turistas.


Lo que quiero decir, más como nota mental que como prédica, es que para crear cualquier cosa hay que alimentarse. Para escribir hay que leer. Para tomar fotos hay que ver un chingo de fotos. Para hacer vestidos hay que saber absolutamente todo sobre los vestidos. "Pararse en los hombros de gigantes" creo que se le dice a eso. Entonces tal vez uno podrá tocar apenas las ramitas bajas del gran árbol.

Gracias por leer.




16 comentarios

  1. Tenía que hacer un comentario en el post en donde me mencionas, obviooooo, que bonito ha de ser ese Saks, porque si, el de Carso es feo, pero más bonito aún la sensación de entrar a una tienda donde hay cosas muy muy MUY bonitas, donde lo único que te puede decepcionar (o al menos a mi me pasa), es el precio :P

    Saludos!! :D

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exactamente es eso: está lleno de cosas muy muy MUY bonitas y verlas y tocarlas es muy bonito también.

      Eliminar
  2. increible!! y te doy razón, zapatero a sus zapatos!!! La practica hace al maestro y siempre un buen fotografo sabrá tomar buenas fotos, pero no deja que un simple normal también lo pueda hacer.
    http://jenyapio.blogspot.mx/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No, claro. Cualquiera puede hacer cualquier cosa -y deberíamos hacerlas: bailar, cocinar- pero para hacer lo que sea, bien, hay que hacerlo mucho y estudiarlo mucho también.

      Eliminar
  3. Que maravilla lo que escribiste, toda la razón!, como dice más arriba la práctica hace al maestro. Pienso igual que tu en cuanto a comprar mil veces un vestido de diseñador que el tipo vestido de cenicienta.
    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Me encanta leerte! creo que siempre te lo digo, pero es que tienes toda la razón, esa sensación de vacio al entrar al SAKS de carso, o incluso al de Santa Fe, mi hermano dice que son los empleados mas tristes del mundo... y el SAKS de allá, lleno de luz y glamour, me imagino a Blair Waldorf o a Carrie Bradshaw alado de mi.
    Que bonito el McQueen, yo tambien me quiero casar otra vez....

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡La sección de cosmética era increíble! Era como una fiesta.

      Eliminar
  5. Pss jamás he ido a una tienda así aunque haría algo parecido como tu, tomarme fotos de turistas y admirar toda esa ropa de diseñador que solo por fotos he visto, creo me emocionaría.
    http://lforlilyblog.blogspot.mx/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es muy emocionante ver en "persona" lo que solo has visto en fotos: paisajes, vestidos, pinturas...

      Eliminar
  6. Debiste comprar ese McQueen para tu boda o lo que sea que fuese. Hermoso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ash quería comprar todo!!! la cosa es que una boda da pretexto para un gran gasto, pero no se me ocurre otra ocasión en la que se justifique, no cuando uno tiene medios limitados.

      Eliminar
  7. Estoy de acuerdo contigo "Simplicity is the ultimate sophistication", en lo personal hay ocasiones en las que me dejo llevar por algo mas cargado pero siempre y cuando tenga un balance(según yo). En cuanto tu reflexión o nota mental de pararse en hombros de gigantes siento que hacer eso, ver el trabajo de los grande nos motiva y nos inspira a hacer lo que queremos o si ya lo haces, hacerlo mejor, pero también pienso que se puede empezar de cero e irse puliendo en el camino (no aplica para médicos).

    Saludos, me gusta mucho leer tu blog.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "No aplica para médicos" me hizo soltar la carcajada. No, para ellos no. Empezar de cero no tiene nada de malo, lo malo es seguirse de largo... en ceros!

      Eliminar
  8. Me hiciste recordar hace 12 años que fui a pasar un tiempo a Vancouver, ya me encantaba la moda y conocia un poco de las marcas por revistas e internet, pero no tenia idea de los precios y la primera tienda de lujo que visite fue Hermes, casi me voy de boca al ver la etiqueta!!! pero es cierto no se puede hacer mas que admirar los diseños. Me imagino que por eso net-a-porter a tenido tanto exito, ya que si tienes el dinero tambien tienes acceso al lujo en cualquier parte del mundo!!!
    saludos!!
    www.elestiloimporta.blogspot.com

    ResponderEliminar
  9. que bonito quedo tu post años que no me pasaba por aquí y ahora que estas mas rellenita te vez mas guapa.

    ResponderEliminar

Ir arriba